Así lo aseguró el integrante del Comité Asesor en Ciencias del Deporte (CACD) de la Subsecretaría de Deportes de la provincia de Buenos Aires y kinesiólogo que acompaña al tenista argentino, Guido Pella, de cara al próximo Grand Slam. Ambos se encuentran aislados en un hotel de la ciudad de Melbourne por dos casos positivos detectados en el avión en el que viajaban. “Es difícil porque hay demasiada diferencia con los que pueden salir pero estamos buscando mantener todas las capacidades de nuestro deportista, cuidándolo de los factores de riesgo para disminuir posibles lesiones y mantener la parte física lo mejor posible”, indicó. 

De cara a la previa del primer Grand Slam de la temporada, se detectaron dos casos positivos de coronavirus en los vuelos que llevaban a 47 tenistas, entre ellos el argentino Guido Pella. Las autoridades del certamen decretaron una cuarentena obligatoria de 14 días para todos los pasajeros considerados contacto estrecho. El tenista argentino junto al kinesiólogo, Andrés Romañuk, viajaron en uno de los aviones donde se registraron los casos de Covid-19 y se encuentran aislados en un hotel de Melbourne.

“Llegamos al aeropuerto de Melbourne en un chárter que armó el torneo de aproximadamente 80 personas entre jugadores, equipos y gente vinculada a la competencia. Aterrizamos y fuimos directamente a una zona diferenciada para nosotros donde íbamos pasando por ´estaciones´, limpieza de manos, cambio de barbijos, migraciones, chequeo de pasaporte, verificación de test PCR COVID negativo y, por último, el hotel asignado en donde debíamos alojarnos”, relató Andrés.

Al tiempo que añadió: “Una vez que llegamos al hotel, nos hisoparon y aislaron hasta que tuviéramos el resultado. Si todo iba bien, a partir de ese momento comenzaba nuestro aislamiento con un régimen de salida de cinco horas por día para entrenar físico, tenis y comer”. El problema estuvo en que al otro día nos avisaron que dos personas con las que habíamos viajado habían dado positivo y el Gobierno decidió hacer un aislamiento total de las personas que iban en el chárter, sin ningún tipo de salida”.

Ante tales circunstancias, Romañuk relató que “intentamos enfocarnos en objetivos cortos, armar cierto cronograma del día para ordenarnos un poco, algo así como desayuno, entrenar, recuperación/kinesiología, almuerzo, dispersión, entrenamiento, recuperación/kinesiología y cena.  Obviamente es una situación que no esperábamos, donde estamos en condiciones adversas respecto a los que pueden salir a entrenar pero en sacar lo mejor de este momento”.

Al ser consultado por el sistema burbuja, el miembro del Comité Asesor en Ciencias del Deporte (CACD) de la Subsecretaría de Deportes de la provincia de Buenos Aires que conduce Javier Lovera, describió que “en este momento estamos completamente aislados, no podemos salir de nuestra habitación,  somos tres en dos habitaciones con una puerta que conecta ambas. Nos hisopan todos los días desde que llegamos y el Gobierno del estado de Victoria nos llama por teléfono todos los días para conocer nuestra salud general y mental”.

Bajo un marco de situación de malestar generalizado, Andrés contó que las circunstancias son difíciles para Guido ya que hay diferencia con los que pueden salir. “El tema pasa por mantener la parte física lo mejor posible y lo más similar a la demanda en la cancha, intentando tener cargas de entrenamiento parecidas a un contexto real, porque si las disminuimos cuando volvemos a su demanda habitual aumenta el riesgo de lesión. Debemos dosificar la vuelta al tenis correctamente”.

Por su parte, en declaraciones a Infobae.com, Guido Pella apuntó contra la organización del Grand Slam, señalando los privilegios para unos pocos y el silencio de Rafael Nadal. “Se cayeron todas las caretas”, dijo refiriéndose a sus colegas. “Todo quedó muy clarito, al torneo le interesan solo tres jugadores y me llama la atención que no se hayan manifestado tenistas que podrían tener influencia”, remarcó.

En la misma línea, el tenista bahiense manifestó: “salimos de la cuarentena y tenemos que empezar a jugar, a eso vinimos, pero mi mente estará en no lesionarme. Además te tenes que acomodar a nuevas condiciones después de tantos días de encierro, como salir al aire libre, tener aire natural, sol y moverte con libertad. Ya me pasó en Estados Unidos y te sentís como medio perdido al principio”.

En vísperas del inicio de la competencia en Australia, Pella declaró que “no es joda lo que está pasando en esta situación donde sigue muriendo gente todos los días hay que ser más solidario con el otro”.  En tal sentido, reconoció que si bien hoy no es tiempo para la vacuna a los tenistas, porque son prioritarios los grupos de riesgo, “si algún país empieza a ofrecer vacunas y me hace bien para mi trabajo, voy a tratar de conseguirla porque es inviable jugar al tenis en estas condiciones”.

Pella será la segunda raqueta del equipo argentino que participará de la ATP Cup, del 2 al 6 de febrero, junto a Diego Schwartzman. “Lamentablemente ellos se van a tener que ´poner la 10 y salir a ganar´. Yo voy a hacer lo que pueda y a aprovechar para conseguir ritmo para el Abierto de Australia”.